Oscura Inspiración

Entre árboles de neblinosas copas y caminos alfombrados por hojas secas, pequeñas ramas y huesos de pequeños animales que perecieron por hambre, sed y miedo. Telarañas por cortinas y cabos de vela esparcidos sobre piedras de afilados y sanguinolentos bordes...
En un lecho de ponzoña negra y veneno gris, en el centro de un jardín de mandrágoras y belladona, reposa la musa muerta del escritor miserable, quien anhela su imposible retorno. Los demonios se la han llevado al infierno de páginas en blanco y tinta seca.
Reposa inerte la musa, con su cuerpo traslúcido cubierto de escarcha. Lágrimas de sangre se han secado en sus mejillas pálidas. Su vestido vaporoso muestra manchas de verde musgo y rasgaduras. Sus pies descalzos, llenos de llagas y heridas. Sus manos de quebradiza piel y uñas viejas.
Ha partido la musa a una prisión de acero y fuego. Allí ha de consumirse el destino del escritor. Nadie vendrá a ayudaros, señor de las palabras. Habréis de completar vuestra tarea en soledad.
¿O llegará tal vez un cuervo de plumas negras y escalofriante graznar, susurrando palabras oscuras que habrán de inspirar las historias que han de ser contadas? ¿Será el alma de un cuervo la nueva musa que aguardáis?
Será el cuervo, y no la musa, quien habrá de otorgarme la Oscura Inspiración que necesito.
Oscura Inspiración, destinada a completar el círculo, la vida y destino del Hombre Muerto.